En Sangre Vinotinto tuvimos la oportunidad de entrevistar a Ottoniel Medina, que a sus 20 años de edad cuenta con un historial ascendente dentro del fútbol venezolano.
El defensor nos contó cómo ha sido su experiencia en Segunda y Primera División con los diferentes clubes en donde ha tenido la oportunidad de demostrar su talento: “Mi experiencia en el FUTVE ha sido buena. Tanto en el Unión Atlético Falcón como en el Deportivo JBL Zulia tuve una gran oportunidad viendo muchísimos minutos; de hecho, en el UAF fui el juvenil que más minutos disputó y en seis meses que estuve con el JBL sucedió lo mismo. Ya luego en el Carabobo FC no he logrado contar con tanta regularidad como en Segunda”.
Con el conjunto granate no ha tenido mucha participación, pero logró disputar por primera vez la Copa Libertadores. Ottoniel nos comentó que en el partido de ida, disputado en el CTE Cachamay, vivió su mejor y peor momento dentro de un campo de juego: “Mi mejor momento, sin duda alguna, fue en el debut de Copa Libertadores 2020. Es algo de ensueño, te llegan los recuerdos y aún no lo crees. Mi peor momento fue en ese mismo partido, ya que al minuto 72 salí lesionado. Te queda la sensación amarga de que tu equipo va ganando el partido (1-0) y no quieres salirte para seguir aportando. Pero así son las cosas de Dios y solamente él sabe cómo hacerlas”.
En aquel encuentro de Libertadores fue uno de los jugadores más elogiados, tanto por periodistas nacionales como internacionales, demostrando en el campo su gran progreso desde que comenzó a jugar fútbol en el Independencia FC (club amateur del estado Falcón). Hay momentos en la vida donde los recuerdos pasan por su mente y en ese debut Ottoniel recordó todo lo vivido para llegar al partido: “El momento del debut es algo que cuando estás en el túnel para entrar al campo hace que todo se ponga lento. Me hizo recordar cuando comencé en el Independencia, que llegué con unas botas rotas a entrenar por primera vez y Edgar "Pacho" García, al verme sentado solo, me llamó para entrenar junto con los demás niños.
Todos esos recuerdos los vives en menos de cinco minutos, toda tu vida se resume, todo lo que has pasado y vivido, experiencia tras experiencia”.
Ángeles en su camino
Luego de salir lesionado en el partido de ida ante Universitario, era poco probable que estuviera recuperado para viajar a Lima, sin embargo, todo fue posible. “Al segundo día de llegar a Valencia llamé a Milagros, fisioterapeuta que estuvo con nosotros en Falcón y quien anteriormente me había recuperado de un esguince en el tobillo. La llamé porque necesitaba que me recuperara y eso fue exactamente lo que hizo”. El jugador agradece a Dios por poner a la fisioterapeuta y a su esposo en su vida, ya que varias veces lo han recuperado de sus lesiones.
La pasión del fútbol en otras latitudes
Aunque aún no se ha convertido en un VenEx, gracias a la Libertadores logró conocer la pasión por el fútbol fuera de nuestras fronteras. “La diferencia de jugar aquí y en Lima es la fanaticada y la organización en cuanto a los partidos. Acá nos tocó jugar en Puerto Ordaz, lejísimos de nuestra sede, si eran 200 personas creo que exagero. En Lima sí fueron cerca de 55 mil a ver el partido, y creo que quedo corto. La adrenalina que te llega al cuerpo en el momento de salir al campo es clase aparte. Ellos viven el fútbol de otra manera, desde que salimos del hotel al estadio todo el mundo con la camisa ‘crema’ puesta”.Por último, Ottoniel también nos comentó lo que cambiaría para tener una mejor liga en Venezuela: “Creo que la organización de los torneos, tanto en Primera como en Segunda División, y que haya mejoría en los estadios para que siempre estén en óptimas condiciones”.
Ojo, todavía queda Ottoniel para rato. ¡No te pierdas la segunda parte de la entrevista!
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